Manténgase de pie recto frente a la máquina de polea.
Fije el asa a la altura del hombro y asegúrese de que el peso sea el correcto.
Sostenga el asa en su brazo a ejercitar.
Extienda el brazo directamente frente a usted con la palma hacia abajo.
Retroceda hasta que sienta que el peso elegido se levanta ligeramente respecto al resto.
Separe los pies un poco más que la distancia de las caderas.
Relaje las rodillas y apriete los músculos abdominales.
La espalda debe estar recta, los hombros cuadrados y la mirada directamente al frente.
Esta es su posición de partida.
Empiece por llevar los omóplatos suavemente hacia atrás, y lleve el codo hacia atrás y hacia el lado.
La parte superior de su brazo debe permanecer en posición horizontal.
Una vez que la parte superior del brazo esté directamente al lado, mantenga esta posición mientras gira el antebrazo hacia el techo.
Imagine que gira alrededor de su codo.
Controle el movimiento mientras invierte la secuencia.
Gire su antebrazo de vuelta hacia el frente, y luego extienda su brazo de manera constante hacia la máquina de polea.
Por último, relaje sus omóplatos.
Repita el movimiento, manteniendo el cuerpo erguido, los hombros hacia delante y la mirada al frente.
